LA MIRRA Y EL OTRO BALTASAR...

A todos aquellos aquellos que buscan la paz y no encuentran.

El reino del otro Baltasar era el Juzgado Central de Instrucción número 5, en donde se investigan los delitos cuyo enjuiciamiento corresponde a la Audiencia Nacional, que enjuicia en primera instancia los delitos con implicaciones en todo el territorio o de mayor gravedad.

Y es que amparándose en una nueva ley denominada ley de la Memoria Histórica  éste ha pretendido desenterrar los crímenes del franquismo y enterrar a su vez la Ley de Amnistía de 1977, una ley que es repentinamente para unos, extranjeros incluidos, una manera hipócrita de intentar pasar página tras un perdón general al equiparar las víctimas con sus verdugos...

pero ¿Acaso no quedó la transición española como un gran ejemplo ante el mundo?

Entiendo, aún cuando casi haya pasado dieciseis lustros desde nuestra guerra y represión fraticida , que existan cicatrices. Entiendo que puedan quedar cosas por hacer que no fueran resueltas en la transición...pero ¿buscar a estas alturas a los culpables?...Creo que fue Santiago Carrillo el que mencionó el sinsentido de  'desenterrar unos muertos', ya que éste hecho traería como consecuencia el 'desenterramiento de otros'. Y no le faltó razón...(*)

Aunque es inevitable que cada uno de los magistrados dispongan de bien principios, bien ideales, parece logico pensar que éstos no debieran nunca prevalecer sobre  la imparcialidad que es una de las cualidades de la buena justicia. Esto me lleva a pensar que tal vez Baltasar cometiera el error de haber entrado en política, o tal vez cometiera el error de haber vuelto a la magistratura.

Y es que hace ya mucho que se dejó de usar la mirra para embalsamar muertos que no es otra cosa que preservar de la putrefacción la integridad de los cadáveres, unos cadáveres que por mucho más que hagamos no volverán jamás a la vida.

Espero que algún día, este otro rey llamado Baltasar, vuelva a brillar con luz propia.

Mañana puede ser un buen día para mirar hacia delante.

*Santiago Carrillo, aquel que aceptó la rojigualda en detrimento de la tricolor. El 'desenterrar' es para mí una metáfora de buscar a los culpables, ya que nadie puede negarle el derecho a una persona a  que recupere de una fosa común los restos de un familiar.